Siete puntos para mejorar los diálogos de tu guion

A lo largo de los años como asesora de guionistas y analista de guion, he comprobado que los mejores guiones son aquellos escritos por escritores meticulosos que no se conforman con su primer borrador, que corrigen y reescriben una y otra vez buscando la mejor versión posible de su trabajo.

Uno de los elementos que más preocupa a estos guionistas buscadores de la perfección (o de algo que se le acerque lo más posible) son los diálogos. Releer los diálogos preguntándose cómo pueden mejorarse es una tarea que siempre obtiene su recompensa: un mejor guion.

Los siguientes son varios puntos que resulta muy útil repasar cuando se están revisando los diálogos:

1. Pregúntate si basta con la acción para contar lo que quieres decir

Como medio de contar nuestra historia en cine o televisión, la acción tiene más fuerza que la palabra porque captamos más del pensamiento y los sentimientos de los otros a través de sus expresiones, gestos y reacciones que mediante lo que dicen.

Pregúntate ante cada réplica que estés revisando si no hay una manera de contarla mediante la acción de los personajes y, si la hay, elimina esa frase y substitúyela por una acción.

2. En ocasiones, el silencio puede expresar más que las palabras

La respuesta a una pregunta no tiene por qué ser una frase, puede ser un gesto, una mirada, un silencio que muestra que no se quiere contestar a lo preguntado…

Los silencios pueden ser una parte muy activa de un diálogo, no tengas miedo de utilizarlos.

3. No intentes demostrar lo inteligente o culto que eres mediante los diálogos

Que la réplica de un personaje sea un brillante discurso sobre su ideología, su forma de ver la vida o lo mucho que sabe sobre la cría del calamar verde en los Trópicos puede ser un párrafo brillante pero innecesario para nuestra escena. Puede que te haya quedado perfecto y pruebe lo inteligente y culto que eres, pero es posible que resulte recargado, artificioso o poco verosímil.

4. Pule tus diálogos al máximo eliminando todo lo inútil

” Lo bueno, si breve, dos veces bueno”. Lo dijo Baltasar Gracián en el siglo XVII. Era verdad entonces y lo sigue siendo ahora: cuanto más conciso sea un diálogo, cuantas menos frases inútiles tenga, mejor y más efectivo será.

Pule tus diálogos frase por frase, palabra por palabra, hasta asegurarte de que no hay nada inútil que les reste agilidad y dinamismo.

5. Utiliza el subtexto

Los personajes no tienen por qué decir (ni deben hacerlo) siempre todo lo que se les pasa por la cabeza. Tampoco lo hacemos las personas reales cuando hablamos con alguien.

Muchas veces, la verosimilitud y la profundidad de una frase está en que intuimos que el personaje no está siendo sincero o no está diciendo toda la verdad, se engaña a sí mismo, oculta algo, piensa lo contrario de lo que está diciendo…

Trabaja el subtexto, construye frases cuyo significado vaya más allá de lo que el diálogo dice literalmente.

6. Evita, dentro de lo posible, artimañas explicativas demasiado obvias

Llamo artimañas explicativas a recursos tan evidentes como el personaje leyendo en voz alta un texto (una carta, un mensaje de una red social, un texto de la pantalla de su ordenador, etc), utilizando la voz en off o escuchando una noticia en la radio o tv.

A veces, estos pueden ser buenos recursos y es apropiado hacer uso de ellos pero no te pases, utilízalos con cuentagotas y sólo cuando no puedas dar la información de otra manera.

7. No des más información de la necesaria para que el espectador comprenda la trama o se implique emocionalmente en la historia que se le está contando

Todo lo que no sirva para que el espectador entienda la narración o para activar en él algún tipo de sentimiento o emoción que le haga sentir suspense, miedo, alegría, diversión, empatía por el personaje o cualquier otro elemento que le haga implicarse en la historia, conseguirá todo lo contrario a lo que deseas: hará que se sienta confuso o se aburra.

Estos puntos no son los únicos a tener en cuenta a la hora de escribir o revisar un diálogo, pero es muy útil tenerlos en cuenta de cara a que tu guion sea el mejor guion posible.

Si tienes un guion escrito y necesita una revisión, puede que quieras un análisis de guion que te ayude a mejorarlo.

Si tienes una idea y quieres convertirla en guion con la ayuda de alguien que te dé una visión desde fuera, puedes pedir un análisis de proyecto o una asesoría personalizada.

Si quieres escribir tu primer guion y no sabes por dónde empezar, pide una tutoría de acompañamiento que te ayude desde la primera línea hasta la última versión del guion.

Escribe a info@cineseriesytecnicasdeguion.com para solicitar información y tarifas.