Pablo Escobar, el patrón del mal

Escobar

Pablo Escobar fue apodado El Patrón del Mal, El Capo, El Duro, El Zar de la Cocaína…

En la década de los ochenta estableció alianzas con otros capos del narcotráfico de la zona de Antioquia (Colombia), creando así el famoso Cartel de Medellín que llegó a controlar más del 80% de la producción mundial de cocaína.

Hizo tanto dinero que propuso al gobierno colombiano pagar la deuda externa del país a cambio de un acuerdo. Es, muy probablemente, el narcotraficante más famoso de todos los tiempos.

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La serie “Pablo Escobar, el Patrón del Mal” emitida en 2012 por la Cadena Caracol narra su biografía. Escrita por el guionista Juan Camilo Ferrand, está basada en el libro de Alonso Salazar, “La Parábola de Pablo”.

Cuando empecé a ver “Pablo Escobar, el patrón del mal”, lo primero que me gustó de ella fue que su protagonista no tiene el falso glamour de los asesinos y mafiosos de muchas producciones norteamericanas.

Este Pablo Escobar, magníficamente interpretado por Andrés Parra, es gordito, con barriguita, con el pelo lleno de gomina o algún producto similar para intentar dominar sus rizos encrespados, peinado con una raya al lado que parece trazada con herramientas de precisión… asesino caprichoso y sin escrúpulos que cuando su madre le reprende por sus acciones, baja la cabeza y se excusa con tono infantil alegando que “todo es mentira, ma… son calumnias”.

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Otra cosa que me conquistó de la serie “Pablo Escobar, el patrón del mal” es que no se conforma con mostrar acción física, persecuciones, tiroteos, violencia… como tantas producciones que versan sobre la temática del narcotráfico, sino que sitúa la trama en su contexto histórico, muestra la sensación de impotencia de los gobernantes ante una situación que parecía habérseles ido de las manos, nos hace sentir el desamparo y la tragedia de los ciudadanos colombianos y de aquellos que se oponían a Pablo Escobar y al Cartel de Medellín…

“Pablo Escobar, el patrón del mal” es una serie que me ha enganchado y  mantenido en vilo desde su primer episodio hasta el último.